Dice un amigo que uno en Semana "Santa" no debe hacerse preguntas tan trascendentales. Pero cuando este puente largo pasa así, sin pena ni gloria, tal vez el común denominador sea llenarse de preguntas.
Dicen las noticias, es más, dice el mismo Antonio García en entrevistas en La Jornada y TeleSur, que hay posibilidades de desmovilización de la guerrilla que preside. Pero para personas como yo, dentro del montón de la sociedad civil educada fuera de contexto, hay cosas del conflicto armado colombiano que le resultan difícil de entender. Y surgen las inquietudes:
¿Por qué será que el ELN se nota a favor de una negociación con el gobierno más derechista (entre los derechistas) y más capitalista (entre los capitalistas)?
Raro, ¿no? De verdad me intriga.
Y mi cabeza hace una lista de hipotéticas respuestas:
1. ¿Será que el ELN está en realidad derrotado militarmente?
2. ¿Será que los actuales dirigentes del ELN se cansaron y se dieron cuenta que era mejor que todos hubieran tomado el camino de sus desertores de la Corriente de Renovación Socialista (no seguir en la guerra pero seguir comentándola -y viviendo de ello-)?
3. ¿Acaso el ELN se está preparando para una negociación con el futuro gobierno de Carlos Gaviria?
Ni idea.